¿Para qué estoy aquí en la tierra?

En la actualidad, una persona vive un promedio de 25,550 días. Si usted es una persona típica, ese es el tiempo que vivirá. ¿No cree que sería un sabio uso de su tiempo apartar 40 de esos días para averiguar qué quiere Dios que haga con el resto de ellos?

A menos que se de por hecho la existencia de Dios, la búsqueda del propósito de vivir no tiene sentido.
¡Les recomiendo que lean desde el primer día! Si desean tener el libro, sólo díganme y se los paso.

viernes, 26 de agosto de 2011

Día 17. Un lugar a pertenecer.

Seguir a Cristo implica participación, no solamente creer. Dios te creó para desempeñar un papel específico, pero si no te vinculas a una iglesia viva y local, te perderás el segundo propósito de tu vida. Descubrirás tu papel en la vida mediante tu relación con los demás.

Ser miembro de la familia de Dios tiene repercusiones y no es algo para ser ignorado casualmente.
Efesios 5:25
Cristo amó a la Iglesia, entregó su vida por ella.
La iglesia sobrevivirá al universo y tu papel con ella también.

Congregación local
La necesidad de la familia eclesiástica
  • Te permite identificar como creyente genuino.
  • Te aparta del aislamiento egocéntrico.
  • Te ayuda a mantenerte en forma espiritualmente.
  • El cuerpo de Cristo te necesita.
  • Compartirás la misión de Cristo en el mundo.
  • Evitará que te apartes.
La vida cristiana es más que el simple compromiso con Cristo: también implica el compromiso con otros cristianos. Cuando te comprometes con Cristo, te conviertes en cristiano; pero te conviertes en miembro de una iglesia cuando te comprometes con un grupo específico de creyentes. La primera decisión trae la salvación; la segunda, la comunión.
EL GRADO DE COMPROMISO QUE TENGO CON MI IGLESIA LOCAL, ¿REFLEJA MI AMOR Y COMPROMISO CON LA FAMILIA DE DIOS?
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